Fue descubierto en 1718, año en que estos mismos habrían fijado ahí su residencia, en los márgenes del Río Grande.
Más tarde, el poblado vendría a ser denominado Nuestra Señora del Río Grande.
El nacimiento del Río Capivarí está en la Sierra de las Carrancas, acoplado al Complejo de la Zilda (con cascadas, rápidos naturales y grutas).
Este complejo ecológico consta en las áreas prioritarias para conservación de la Fundación Biodiversitas.
La parroquia local pertenece a la diócesis de São João del-Rei.