Carpentum

El carpentum (en plural, carpenta) fue un tipo de carro usado en la antigua Roma, especialmente por mujeres de alto rango.

Normalmente de dos ruedas y más raramente de cuatro ruedas, el carpentum era tirado por dos mulas o caballos.

[1]​ Estos carros cubiertos empezaron a usarse en la península itálica a partir de 500 a. C. Dentro de la ciudad de Roma, para descongestionar el excesivo tráfico en las sinuosas calles, Julio César prohibió el tráfico rodado durante el día, excepto los carros comerciales y los carpentum de las damas, que los solían emplear muy adornados solo para los días festivos.

De ahí que los acomodados se desplazaran por lo común en literas.

No sería hasta el siglo III d. C. que en el imperio romano se otorgó el derecho a utilizar carros y carromatos en la ciudad a los altos funcionarios y al mismo emperador.

Representación del carpentum típico sobre un sestercio de Calígula.
Sestercio en memoria de Agripina la Mayor (37-41 d. C.) mostrando en el reverso el carpentum donde fueron transportadas sus cenizas.
Carpentum de cuatro ruedas.