Carl Swartz
Con el fracaso, debido a presiones externas y falta de armonía interna, del gobierno no alineado partidariamente de Hjalmar Hammarskjöld, el rey Gustavo V convocó al partidariamente conservador Swartz para que asumiera como primer ministro.Este aceptó la designación, más por sentido del deber que por deseo personal de ocupar tal puesto.Swartz terminó también rápidamente las negociaciones con los poderes de la Triple Entente, principalmente con Gran Bretaña, sobre importaciones desde el oeste, que Hammarskjöld había impedido.Esta acción fue histórica: fue el primer líder conservador en seguir el principio parlamentarista de que el pueblo -y no el Rey- puede elegir el gobierno.En 1912, donó Villa Swartz a la ciudad de Norrköping, como alojamiento para una biblioteca y un museo.Casado en 1886 con Dagmar Lundström, tuvo con ella tres hijos, Erik, Brita y Olof.