El borde exterior está erosionado y presenta hendiduras producidas por impactos de cráteres menores, con muescas en el norte, oeste y sur del brocal.
En el piso interior ha resurgido la lava basáltica, conectada con el mar lunar circundante a través de un hueco estrecho, formado en su lado norte.
El fondo es particularmente notable por alojar una serie de domos, que se cree que se formaron a través de la actividad volcánica.
Al noreste el borde se sumerge, quedando muy cerca de la superficie, y apenas forma un reborde curvado sobre el terreno.
Por convención estos elementos son identificados en los mapas lunares poniendo la letra en el lado del punto medio del cráter que está más cerca de Capuanus.