Los cuernos, de mediana longitud, forman más o menos un medio arco circular.
Se estima que una manada recorre habitualmente de 1,5 a 2 km al día.
Es el único caprinae del África subsahariana, adaptándose al clima templado de las montañas y mesetas etíopes.
Suele ser huidiza, pero cerca de los papiones geladas se muestran un poco más confiadas.
Entre sus depredadores encontramos a las águilas, y ocasionalmente los lobos etíopes, también en gran riesgo de extinguirse.