Cantata a Bolívar

También fue presentada en vivo en el Teatro Teresa Carreño en esas mismas fechas.

Si bien la composición sinfónica no es uno de los aspectos más destacados de Formoso (hasta la fecha esta es la única que hizo o al menos la única que se le conoce) no cabe duda de que, por la calidad de la misma, amerita ocupar un lugar destacado en la música en general y la venezolana en particular junto a la Cantata Criolla de Antonio Estévez.

La Cantata a Bolívar rompió con la estructura tradicional y clásica de la cantata como manifestación musical básicamente religiosa y se sumergió en las propias raíces del crisol de la americanidad: El Altiplano, el Caribe y el Llano cabalgando sobre frases musicales y corales donde se pone de manifiesto la siempre beneficiosa influencia de Händel, van realzando y poniendo acentos sobre el inmortal poema de Pablo Neruda.

El fraseo coral, fundamental en una cantata, debido a la falta de equilibrio técnico y sonoro con los instrumentos filarmónicos, hizo que se diluyera a veces y otras sonara confuso perdiéndose partes importantes de las estrofas de Neruda.

Es de destacar el arreglo y orquestación de Pedro Mauricio González y la impecable dirección del maestro Pablo Castellanos.

Xulio Formoso en concierto.