Debido a que las formaciones subterráneas que contienen petróleo (yacimientos petrolíferos) pueden extenderse sobre grandes zonas, a veces de varios cientos de km², una explotación completa conlleva varios pozos o plataformas diseminados por toda un área.
Además, puede haber pozos exploratorios que investigan los límites, tuberías para transportar el petróleo a cualquier lugar y locales de apoyo.
A menudo se pueden ver pozos ubicados muy próximos entre sí (apenas unos cuantos metros).
Por ejemplo, los trabajadores tienen que realizar su labor allí durante meses o años, y requieren hospedaje.
Existen más de 40.000 campos petrolíferos extendidos a lo largo del globo, tanto en tierra como mar adentro.