Calamanda

La tradición indica que nació en Soler Lladrús,[2]​ en Calaf, hoy Barcelona.

[nota 1]​ Existen muchas hipótesis sobre la fecha y las condiciones de su muerte.

[2]​ Josep Baucells, afirma que la leyenda recibió culto en las ciudades de Vich, Cervera y Lérida y, especialmente, en Barcelona, donde se construyó una capilla en su honor en 1268, por orden del obispo Arnau de Gurb.

[2]​ La confirmación de su culto fue promulgada por el Papa Urbano V, en el siglo XVI.

Dicha confirmación extendió el culto de Calamanda hasta Noya, en Cataluña.