Caicumeo (< mapudungun kalku o kaiku «el hechicero» y mew «donde»)[1] fue un hombre de Chiloé de origen huilliche del siglo XVIII que, por petición del Gobernador de Chiloé Antonio Martínez y la Espada o Francisco Hurtado del Pino, debió trazar el que se considera el primer camino real o público construido en la provincia de Chiloé, y que unía la ruta San Carlos de Chiloé (hoy Ancud) y Santiago de Castro (hoy Castro),[2][3] y que habría medido cerca de 88 km.
[4] La ruta, llamada en su memoria Camino de Caicumeo o Camino del Cacique Caicumeo, habría sido finalizada en 1787 gracias a su habilidad como ateador,[5] pudiendo darle una correcta dirección al trazado;[6] sin embargo, otros autores indican que dicho camino recién se habría mandado a construir en 1788[7] o que ya habría estado listo en 1781, teniendo decenas de puentes y «planchados»[n 1] de roble,[8] que décadas después aún mantenía su vigencia como vía de comunicación en Chiloé según se consigna en el discurso del Ministro del Interior R.L.
Irarrázaval ante el Congreso en 1843.
[9] Este camino: Tras esta acción, el Gobierno provincial habría premiado a Caicumeo otorgándole tierras bajo el concepto de Merced real.
[11][12]