[4] La cadaverina es un líquido incoloro o de color almibarado, fumante, que desprende un olor fétido muy desagradable.
[3] Posee una densidad inferior a la del agua (ρ = 0,873 g/cm³)[3] pero mayor que la de pentanaminas como la 1-pentanamina o la 3-pentanamina.
Se forma por descarboxilación de la lisina, reacción catalizada por la enzima lisina descarboxilasa (LDC): La cadaverina se encuentra principalmente en la materia orgánica muerta, siendo responsable en parte del fuerte olor a putrefacción.
No obstante, esta amina no está relacionada exclusivamente con la descomposición; es también producida por organismos vivos en pequeñas cantidades, siendo parcialmente causante del distintivo olor de la orina y del semen.
Asimismo, un estudio publicado en 2007 reveló que el nivel de cadaverina en saliva está directamente relacionado con la halitosis.
Este compuesto químico se puede sintetizar a partir de la lisina —véase más arriba— utilizando como catalizador 2-ciclohexen-1-ona.
A su vez, la cadaverina sirve para la elaboración de aminas más complejas como N',N'-dimetilpentano,1-5-diamina, 1-piperideína y aminopropildiaminopentano.
[17] En cuanto a su uso, la cadaverina se emplea como intermediario en la producción de polímeros como poliamidas, poliuretanos y nailon.