El sultán de Tlemcen luego huyó a Fez en Marruecos.
El único sobreviviente de la dinastía Abu Zayan fue Sheikh Buhammud, que escapó a Orán (Imperio Español) y pidió la ayuda de España.
Los españoles, sin embargo pronto reaccionaron en 1518 con el lanzamiento de un ataque a Tlemcen, que fue a 70 millas de distancia de Orán, y lograron acorralar y matar a Aruj.
Ese año, el gobernante Wattásida de Marruecos Ahmad fue hecho prisionero por sus rivales, los Sharifian Saadianos.
Su sucesor, Ali Abu Hassun, regente para el joven hijo de Ahmad Nasir al-Qasiri, decidió jurar lealtad a los otomanos a fin de obtener su apoyo.