Seis años después, entró a formar parte de la redacción de La Vanguardia, en la que, poco más tarde, fue nombrado redactor jefe de información local y regional.
Desempeñó el cargo de Delegado de Servicios Municipales y Cooperación Metropolitana en el Ayuntamiento de Barcelona cuyo Alcalde era Enrique Masó entre los años 1973 y 1975.
Ejerció la profesión de abogado especializado en Derecho Administrativo, siendo socio del Bufete Brugueras, García-Bragado, Molinero y Asociados de Barcelona, siguiendo la tradición del Bufete Bertrán y Musitu, fundado por el exministro de Justicia, José Bertrán y Musitu en 1898.
Impartió la asignatura "Derecho de la Información" y "Libertades públicas", que se cursaba en el último año de carrera (5º curso).
Fue miembro de la Association Internationale d´Experts Scientifiques du Tourisme.