César Millán

[3]​ El interés más fuerte de César Millán es la rehabilitación de perros agresivos y siente un cariño especial por lo que él llama "razas poderosas", como pit bull, rottweiler, dóberman y pastor alemán.

Vivían en una casa pequeña hecha de ladrillo y arcilla, con sólo cuatro cuartos y sin agua potable, pero dice que él nunca llegó a sentirse pobre, al contrario, consideró la granja como un paraíso.

Millán apunta que esos perros nunca necesitaron entrenamiento u órdenes especiales, o ser premiados con galletas; ellos sólo hacían el trabajo de acuerdo con las necesidades en su estado natural.

[4]​[5]​[6]​ Sin apenas hablar inglés, consiguió un primer trabajo de peluquero canino, y conoció a Jada Pinkett Smith.

Ambos se hicieron amigos y Jada le pagó durante un año un profesor para que aprendiera inglés.