El primer recluso -amigo de Juan Moreira- anotado en sus registros fue Julián Andrada, argentino, casado, 25 años, analfabeto, encausado por homicidio.
Actualmente unos 440 oficiales y suboficiales forman la dotación estable del penal.
En otros pabellones las celdas conservan las viejas puertas de madera con una pequeña ventanita que sirve como pasaplatos.
Años después Irigoyen las recicló para los filmes sonoros Sierra Chica (1938) y Su íntimo secreto (1948).
En 2014 el director Jaime L. Lozano estrenó la película Motín en Sierra Chica,[2] relatando los hechos que sucedieron en el motín ocurrido en las Pascuas del año 1996, y en 2019 se estrenó La visita, una película documental dirigida por Jorge Leandro Colás sobre las mujeres que viajan hasta el penal a visitar a los presos.