Cáncer de páncreas

Es una de las neoplasias más agresivas por su pronta difusión, su falta de síntomas específicos tempranos y su diagnóstico tardío (al momento del diagnóstico, los pacientes en general tienen la enfermedad localmente avanzada e incluso metastásica, lo que impide la cirugía curativa).

En los últimos años se estudiaron nuevas técnicas para ayudar a la detección precoz del cáncer de páncreas.

[7]​ Todo ello va resultando en una mejora progresiva de supervivencia frente a la última década.

En 1882 Friederich Trendelemburg (1844-1924) realizó la primera pancreatectomía de un tumor que en dicho caso involucraba la cola del páncreas.

En 1909 Walter Kausch realiza la primera pancreatoduodenectomia parcial exitosa a través de un procedimiento en dos tiempos e incluyendo una pancreatoyeyunostomía.

En 1940 Allen O. Whipple realiza la primera pancreatoduodenectomía en un tiempo en una paciente con un tumor de la cabeza del páncreas que sobrevive nueve años.

[10]​ El resto de neoplasias pancreáticas son fundamentalmente adenocarcinoma acinar, tumores neuroendocrinos pancreáticos como el insulinoma, neoplasias quísticas del páncreas, carcinoma pseudopapilar y pancreatoblastoma,[9]​ que tienen un diagnóstico y tratamiento diferentes, con un mejor pronóstico generalmente.

Las tasas reportadas en los países africanos son inferiores debido a la escasez de datos.

Se han hecho búsquedas para determinar los factores ambientales que podrían explicar esta variación.

Los carcinógenos las alcanzarían, provocando su transformación maligna por tres posibles vías de acceso: reflujo biliar, duodenal, o vía sanguínea.

[15]​ Los carcinógenos del tabaco llegarían al páncreas por reflujo biliar a los conductos pancreáticos.

Los estudios casos-control han confirmado la relación entre tal dieta, sobre todo con el exceso en la ingesta de azúcar.

Algunos datos sugieren que la diabetes mellitus es una consecuencia y no la causa, ya que a menudo tiene una evolución menor de dos años y en una gran parte de los casos (57 %) se resuelve tras la resección del tumor.

El riesgo puede aumentar hasta un 70 % en el caso de la pancreatitis hereditaria, especialmente en pacientes fumadores y con diabetes mellitus.

La localización del tumor más frecuente (60-70 %) es a nivel de la cabeza del páncreas y en ellos aparece pronto una ictericia obstructiva, por compresión o infiltración de la vía biliar secundarias al crecimiento tumoral en su vecindad.

[25]​[29]​ La ecografía abdominal simple, es poco sensible y su mayor utilidad está en descartar la presencia de metástasis hepáticas en casos avanzados.

[28]​ Las pruebas de función hepática (PFH) suelen estar alteradas, especialmente en los casos que presentan ictericia franca.

[3]​ Los tratamientos más frecuentemente empleados en el cáncer pancreático son la cirugía, la radioterapia y la quimioterapia.

Las técnicas quirúrgicas más empleadas son:[36]​ La cirugía puede combinarse con radioterapia y/o quimioterapia con dos objetivos: La radioterapia no se emplea como tratamiento exclusivo con intención curativa, ya que las dosis necesarias para destruir el tumor serían elevadas y los efectos secundarios, por tanto, muy graves.

[37]​ Además de como terapia adyuvante y neoadyuvante, la radioterapia en bajas dosis es útil como tratamiento paliativo, es decir, cuando el tumor se ha diseminado a otros órganos y está causando síntomas que disminuyen la calidad de vida del paciente.

Como segundas líneas de tratamiento se pueden citar FOLFOX, FOLFIRI o FIRGEM.

Sin embargo, hasta 2010, solo se demostró que el fármaco erlotinib (comercializado como Tarceva), unido a la gemcitabina, prolongaba más la vida de los pacientes, aunque la mejoría fue bastante pequeña.

[2]​ Pese a los excelentes resultados que se obtuvieron con FOLFIRINOX, este esquema no se generalizó totalmente en la práctica clínica dada su elevada toxicidad, por lo que solo los pacientes con un buen estado de salud son aptos para dicho tratamiento.

[41]​ Se está avanzando hacia la terapia personalizada, lo cual significa individualizar el tratamiento a las características biológicas y genéticas.

aún se necesita aumentar mucho los conocimientos sobre el cáncer de páncreas para lograr una terapia personalizada eficaz.

Se ha demostrado que la combinación de las vacunas GVAX y CRS-207 incrementa la supervivencia en pacientes con adenocarcinoma ductal.

Únicamente se aconseja realizar vigilancia en aquellas personas con factores hereditarios asociados a un riesgo elevado de ADP.

Esquema de la pared del intestino con permeabilidad aumentada . Los dos factores más potentes que la provocan son ciertas bacterias intestinales y el gluten , [ 21 ] ​ tanto en celíacos como en no celíacos. [ 22 ] [ 23 ] ​ Esto permite el paso sin control de sustancias al torrente sanguíneo, con el consiguiente posible desarrollo de cánceres (tanto intestinales como en otros órganos ), enfermedades autoinmunes , inflamatorias , infecciones o alergias . [ 21 ]