Mientras que Burnham fue el diseñador pragmático e impresionante vendedor, Root se convirtió en el genio creativo de la empresa.
Louis Sullivan, llamó a Burnham "un colosal mercader" obsesionado por construir las mayores y más costosas estructuras de la ciudad.
Edificios como el Great Northern hotel (1892), el Argyle y el Pickwick demostraron el singular estilo de Root.
Desde que la exposición abrió las puertas en junio de 1893 hasta su finalización seis meses después, fue un completo éxito.
[5] Burnham no pudo mantener el progreso logrado por Root en la arquitectura, pero demostró una gran versatilidad en su estilo.