Tanto la Reina Isabel II como el Príncipe de Gales han concedido a la marca el título Proveedor Real.
El origen de Burberry era la gabardina que se diseñó para los oficiales británicos durante la I Guerra Mundial.
Con el tiempo, se fue asociando a la cómoda elegancia de la nobleza rural inglesa.
La gama Burberry no dejó de crecer durante los años 90, así como su catálogo.
Sin embargo, su jefe de mercadotecnia, John Williamson, aseguró que la empresa estaba con el agua al cuello: «Cuando caes en manos de la masificación, pierdes el control del cliente».