Sus obras destacan por reproducir animales, en especial perros y de leones.
En una entrevista otorgada por el artista en 1887 titulada "Cómo pintar los animales", Rivière explicó algunos de los aspectos prácticos de la pintura de animales, tanto domésticos como silvestres: «Siempre he sido un gran amante de los perros, pero he trabajado tanto en ellos que me he cansado.
Sin embargo, nunca se puede pintar un perro a menos que le tengas cariño.
La única manera de pintar animales salvajes es acumular poco a poco un gran número de estudios y un gran conocimiento del animal, antes de pintar su imagen, yo lo pinto a partir de animales muertos, y posteriormente me baso en animales vivos».
Dice el artista: «He tenido el cuerpo de una leona muerta en mi estudio.