Es un personaje destacado en El caballo y el muchacho.
Bree nació como una bestia libre y parlante en la tierra de Narnia, pero fue capturado de pequeño por los Calormenes, y vivió su vida como un caballo guerrero de Calormen, propiedad de los seres humanos, teniendo que ocultar su verdadera naturaleza.
Al vivir como la única bestia parlante entre bestias "mudos y tontas", Bree ha llegado a ser a la vez orgulloso y vano.
En su viaje, se unen con Hwin, otra yegua parlante y Aravis, una joven muchacha.
En el transcurso de sus aventuras, logran frustrar un intento de invasión de Archenland a Narnia, y Bree aprende a hacer frente a su orgullo y vanidad cuando Aslan interrumpe uno de sus vanidosos monólogos y le da una lección al final del libro, con el fin de realmente entrar en una vida libre como narniano.