Los refugios de aves son destruidos, y las fábricas comienzan a desechar grandes cantidades de humo, las cuales llegan a las nubes y producen lluvia ácida.
Homer acepta, ya que podía ver la televisión pero, desafortunadamente, la lluvia ácida destruye la antena, dejando la TV sin señal.
Para pasar el tiempo, la familia se pone a jugar al juego de mesa Monopoly.
Las ramas, al caer estrepitosamente, atrapan a Gabriel entre ellas, y el árbol cae por un precipicio.
Sin embargo, cuando llegan, ven frente al garage a Ginger y a Amber, las mujeres con las que Homer y Ned Flanders se habían casado en Las Vegas, estando ebrios.
Amber, asustada por su nuevo marido, y Ginger, harta de Ned, escapan juntas en su auto.
Los Simpson, viendo que habían resuelto algo como familia, se alegran y vuelven a estar juntos.