Los hermanos Braniff se mantuvieron al frente de la compañía, incluso cuando los propietarios cambiaron.
Habitualmente se compara a Braniff con lo que serían las aerolíneas americanas de hoy en día.
Durante los años 30, Braniff Airways expandió sus servicios al centro de los Estados Unidos.
La existencia de Braniff fue asegurada para la supervivencia a largo plazo cuando Paul Braniff, entonces director general, voló a Washington D. C., para solicitar la ruta de correo aéreo entre Chicago y Dallas.
En 1935, Braniff se convirtió en la primera aerolínea en volar desde Chicago, Illinois a la frontera entre Estados Unidos y México.
Durante la década de los 40, Braniff fue autorizado por la Civil Aeronautics Board (quien en aquel entonces regulaba la aviación en los Estados Unidos) para operar destinos del Caribe, Latinoamérica, y Sudamérica.
Lawrence trabajo duramente para dotar a Braniff de una imagen lustrosa, moderna y que llamase la atención.
Durante los siguientes 15 años, Lawrence efectuó un plan de expansión en nuevos mercados sumamente agresivo - combinado con ideas poco ortodoxas en la industria aérea - llevó a Braniff a alcanzar unos resultados financieros y operativos récord en la industria aérea, y alcanzando unas ganancias diez veces por encima de lo normal aun con sólo unas ocupaciones del 50%.
Sin embargo, la "burbuja espacial" fue retirada tras un mes porque los cascos se rompían fácilmente, no había un lugar para dejarlos dentro del avión, y muchos aeropuertos contaban con pasarelas de acceso a aeronaves que hacían los cascos innecesarios.
En 1968, Braniff amplió su campaña publicitaria que mostraba a Andy Warhol, Sonny Liston, Salvador Dalí, Whitey Ford, el Conejito de Playboy, y otras personalidades de la época volando con Braniff.
En 1964, Braniff se convirtió en el cliente de lanzamiento estadounidense del avión bimotor británico BAC-111.
También durante este periodo (1967), Braniff adquirió Panagra, que incrementó su ya de por sí fuerte presencia en Sudamérica.
Este era un Douglas DC-8-62 matrícula N1805 conocido como "Flying Colours Of South America" En 1975, fue presentado en el Paris Air Show en París (Francia).
La primera dama Betty Ford bautizó el "Flying Colours of EEUU" en Washington D. C.. Calder murió en 1976 cuando estaba terminando una tercera librea, llamada "Flying Colours of Mexico"; esta librea no llegó a utilizarse en ningún avión.
Más 747s fueron añadidos, incluyendo la variante 747SP, para efectuar los vuelos a Asia y Europa.
Sin embargo, los problemas financieros de la aerolínea pronto volvieron estas cuestiones irrelevantes.
Desgraciadamente, muy pocos de los nuevos negocios previstos llegaron a materializarse; los vuelos con 747 desde la nueva base de Boston funcionaron realmente mal, con aviones que volaban prácticamente vacíos.
Los vuelos entre los aeropuertos de Dallas/Fort Worth y Washington Dulles estaban comandados por tripulantes de Braniff mientras que tripulaciones británicas o francesas se encargaban del trayecto restante hasta Europa.
La propiedad fue entonces devuelta a Air France o British Airways en el tramo transatlántico.
Mientras tanto, los Boeing 727 que volaban la misma ruta iban llenos muy a menudo.
Sin embargo, al mismo tiempo, la empresa retiraba entre cuatro y seis aviones más antiguos cada año.
Los antiguos empleados de Braniff fundaron Sun Country Airlines con base en Minnesota en 1983.
Tenía una flota compuesta de aviones Boeing 727-200 y DC-10 que duró hasta 2001.
Se reorganizó y actualmente vuela con una moderna flota de aviones Boeing 737-800.