Posteriormente recopiló información sobre la persecución de los creyentes y la compartió activamente con periodistas extranjeros[4].
Desde 1979, llevó a cabo una labor organizativa para crear un Centro para creyentes con mentalidad migratoria en la URSS, afirmando ser su líder.
En 1980 fue elegido secretario del creado Consejo de Iglesias pentecostales soviéticas inclinadas a emigrar[8].
Fue el miembro más activo del comité de creyentes que solicitaron la emigración.
[10] Según la emisora de radio Voice of America, durante la investigación y el juicio se utilizaron sustancias químicas contra Perchátkin, que le provocaron la pérdida del conocimiento[8].
Mientras estaba en Estados Unidos, Perchátkin creó su propio sitio web, en el que describió los detalles de su arresto y encarcelamiento durante la lucha por la emigración[8][14] y organizó la organización cristiana de derechos humanos ARRC[3] (American-Russian Relief Committee).[15].
También publicó un libro autobiográfico, "Senderos de fuego", que fue reimpreso varias veces[8].
Borís Perchátkin, entre otros presos políticos, fue mencionado por Andréi Sájarov en su artículo “La responsabilidad de los científicos”, escrito en 1981.