El primer tipo de bomba de hormigón está acoplado a un camión o las unidades más largas están en semirremolques.
Aquellas mangueras están enlazadas juntas y ventaja a whenever las necesidades concretas de ser colocadas.
Hasta principios del siglo XX, el concreto se mezcló en el sitio de trabajo y se transportó desde el mezclador de cemento al encofrado, ya sea en carretillas o en cubos levantados por grúas.
En 1927, los ingenieros alemanes Max Giese y Fritz Hull tuvieron la idea de bombear hormigón a través de tuberías.
[1] Los diseñadores de bombas de concreto se enfrentan a muchos desafíos porque el concreto es pesado, viscoso, abrasivo, contiene trozos de roca dura y se solidifica si no se mantiene en movimiento.