El parque es únicamente accesible mediante barco turístico o privado.
La isla fue avistada por primera vez por el explorador George Vancouver en 1792, como parte de su exploración del Puget Sound, aunque no le dio nombre.
Después de lo ocurrido, la isla fue abandonada y la casa fue deteriorándose.
Trimble vendió Blake Island a una empresa de inversiones en 1936 y se retiró en Seattle.
En 1959, el estado de Washington convirtió la isla entera en un Parque Estatal.