Originalmente Blackeberg era un croft (parcela de tierra cultivable) mencionado por primera vez en el año 1599.
En 1861 Knut Ljunglöf construyó una casa, un establo, un molino y un aserradero en el lugar.
El aserradero y el molino ahora son edificios históricos y todavía se conservan en Kvarnviken para visitas turísticas.
Muchas personas se trasladaron desde el centro de Estocolmo a Blackeberg y otros suburbios contiguos.
La novela Låt den rätte komma in, del escritor John Ajvide Lindqvist, fue ambientada en la Blackeberg de los 80's y su adaptación cinematográfica fue rodada en gran parte en este lugar.