Bioelectrónica

En el campo de la medicina, implica la estimulación electrónica del sistema nervioso como medio para curar enfermedades.

Los materiales orgánicos (es decir, que contienen carbono) son muy prometedores cuando se trata de interactuar con los sistemas biológicos.

Los Transistores Electroquímicos Orgánicos (OECT, siglas en inglés), inventados en 1984 por Mark Wrighton junto a sus colegas, tenían la capacidad de transportar iones.

[11]​[12]​ La bioelectrónica se utiliza para ayudar a mejorar la vida de las personas con discapacidades y enfermedades.

Por ejemplo, el glucómetro es un dispositivo portátil que permite a los pacientes diabéticos controlar y medir sus niveles de azúcar en la sangre.

[5]​ La estimulación eléctrica se utiliza para tratar a los pacientes con epilepsia, dolor crónico, Parkinson, sordera y ceguera.

Dado que los pacientes con depresión y epilepsia son más vulnerables a tener una CAP (siglas en inglés de vía antiinflamatoria colinérgica) cerrada, la ENV (siglas en inglés de "estimulación del nervio vago") también puede ayudarlos en su tratamiento.

[14]​ Al mismo tiempo, no todos los sistemas eléctricos usados para ayudar a mejorar la vida de las personas son necesariamente dispositivos bioelectrónicos, sino sólo aquellos que implican una conexión íntima y directa de la electrónica y los sistemas biológicos.

Un ribosoma es una máquina molecular que utiliza la dinámica de las proteínas.