La biblioteca tiene 15 sucursales distribuidas por todo el país y su sede central está localizada en la ciudad capital de Lilongüe.
[2] La tarea principal es de operar una biblioteca pública con servicios informáticos por todo el país.
La biblioteca nacional pone pedidos a la organización y libros nuevos son enviados hacia Malaui desde el Reino Unido.
El objetivo es ayudar preservar este patrimonio cultural malauí para evitar que desaparezca.
[1][4] La empresa japonesa Sony, a petición de la comisión nacional de Malaui para la Unesco y la Global Future Charitable Trust (GFCT), proporciona equipamiento audiovisual y formación técnica a malauíes por medio de la biblioteca nacional para recopilar, editar y digitalizar la cultura tradicional nacional.