Tras su formación inicial como fontanero, viajó como oficial y conoció con ocasión de la fiesta de Durero de 1840 a Christian Daniel Rauch, quién le convenció para trasladarse a Berlín, acogiéndole como estudiante en su estudio.
Allí, abrió su propio taller en 1846.
El año 1873 lo pasó viajando por Italia.
En 1874 fue nombrado Miembro del Senado de la Academia de las Artes de Prusia y profesor.
Entre las mejores y más conocidas obras de Bernhard Afinger se incluyen las siguientes: En Berlín: En Bonn: En Greifswald: En Stettin: En Eisenach : En Laasow (ahora parte de Vetschau): En Wuppertal: