Berliner Sportpalast

En los años posteriores, el Sportpalast fue utilizado por otros eventos deportivos como el boxeo, destacándose las peleas que sostuvo allí el boxeador alemán Max Schmeling.

Debido al tamaño y potencial de la propaganda que se llevaba a cabo en el Sportpalast, se dice que Goebbels lo bautizó como „Unsere große politische Tribüne“: «nuestra gran tribuna política».

[3]​ Al final de la guerra en 1945, el Sportpalast se encontraba con severos daños y con su techo completamente destruido.

El edificio no volvió a abrir al público para la práctica de deportes sobre hielo sino hasta 1951, pero estos eventos no fueron muy populares ya que la pista estaba abierta a la intemperie y era muy fría para que los espectadores disfrutaran.

Entre los deportistas más destacados que pasaron por el Sportpalast en sus años de posguerra estaba la mundialmente conocida patinadora artística Sonja Henie.

Max Schmeling en el Sportpalast en 1928.
Placa memorial en la actual ubicación del antiguo Sportpalast en Schöneberg.