Beltrán Pagola

Estudió en su ciudad natal con Santiesteban y en Madrid con Tragó.

De 1898 a 1914 fue pianista del Gran Casino de San Sebastián.

Durante su trayectoria profesional fue maestro de composición de José María Usandizaga y Francisco Escudero, quien le sustituyó en 1948 al frente de la cátedra de composición del Conservatorio.

Su influencia sobre la composición en Guipúzcoa fue decisiva, y se ha transmitido a lo largo de las diferentes generaciones y responsables de la cátedra de composición del Conservatorio de Música de San Sebastián.

Entre sus obras destaca la Sinfonía vasca para orquesta; Humoradas vascas para piano y orquesta; El monje organista y la Sonata para piano.