Su estrategia era enfrentarse a O'Byrne, que amenazaba el corazón inglés en Dublín y la Empalizada atacando desde las tierras altas al del sur de la ciudad.
Mientras intentaban subir las pendientes empinadas del valle, los soldados ingleses novatos fueron emboscados por los irlandeses, que se habían escondido en el bosque.
Los ingleses fueron atacados durante largo rato hasta que la disciplina se derrumbó y huyeron valle abajo.
Fue entonces donde se produjo el mayor número de bajas, ya que los irlandeses abandonaron sus puestos y cayeron sobre los ingleses con espadas, lanzas y hachas.
Centenares de soldados ingleses fueron alcanzados por los irlandeses mientras intentaban huir.