Barthélémy-François Chardigny

En el año 1782 obtiene el Gran Premio de Roma de Escultura, con una obra basada en el título la parábola del Buen Samaritano (del francés: la Parabole du Samaritain).[2]​ Vuelve a trabajar en la ciudad de Toulon, donde recibe un nuevo encargo, pero no cumple los plazos.Chardigny destruyó la cara del rey, lo que hizo pensar que se trataba de un simple caballero, y rehízo la cabeza de la estatua bajo el Primer Imperio.Con el apoyo del director Charles Delacroix, se convierte en un escultor cuasi oficial, recibió muchos pedidos.Este monumento, a veces llamado "fuente del comercio" será transferido en 1825 a la intersección de Boulevard Gambetta y el Boulevard Atenas, en el centro de la plaza des Capucines.En este proyecto decorativo participaron también Jacques-Edme Dumont, Antoine Moutony y Pierre-Charles Bridan en 1812.