Este barrio surgió a finales del siglo XIX al oriente de la ciudad.
[2] Para 1883, la tradición ferroviaria de Aguascalientes ya era conocida en todo el país.
[4] El ferrocarril significó para la población Aguascalentense un sinónimo de progreso; y los primeros beneficiados fueron los empresarios y el gobierno, ya que se convirtió en un gran negocio.
Esto también ocasionó una deforestación desmedida de la Sierra Fría.
[2] Otro gran cambio económico que conllevó el ferrocarril fue la desaparición de las alcabalas para darle agilidad a la dinamización económica que trajo el ferrocarril.