No llegaron a pasar de los 2.000 individuos, aunque algunos afirman que eran 8.000 en 1829, quizás contándolos junto con los shoshone.
Como los shoshone de la llanura, su cultura se basa en el búfalo, el caballo y la vida seminómada.
Cerca del año 1700 llegaron al sur de Idaho y se establecieron a lo largo del río Snake, se separaron de los paiute, de los cuales los separaban 200 kilómetros, viviendo con los shoshone, con quienes domaron caballos y cazaron búfalos en Colorado, Utah, Montana y Oregón, enfrentándose a las tribus locales.
El hambre, la desesperación por la desaparición del búfalo y la insensibilidad de la política de los Estados Unidos les llevaron a la Guerra Bannock de 1878, iniciada con una revuelta donde murieron hombres blancos en Camas Prairie; el cabecilla bannock Búffalo Horn subleva a 200 indios en junio y derrotaron a una patrulla estadounidense, pero estos lograron matarle.
Las nuevas cabezas rebeldes fueron Paiute, Egan y el shoshone Oytes, se reorganizaron en la montaña Sleens, pero el 8 de julio fueron vencidos en Birch Creek.
Egan intenta esconderse en la reserva Umatilla pero le dan muerte, y luego Oytes es capturado.