Balneario Vilas del Turbón

Durante el siglo XIX las aguas del balneario solo eran conocidas en los alrededores, dado que hasta 1908 los accesos al complejo eran malos y el alojamiento bastante incómodo.

Por esas fechas acudían principalmente enfermos del aparato urinario a llevar una cura con la ayuda de sus aguas medicinales.

Sin embargo, su primer uso fue como refugio para niños en la Guerra Civil tras la toma franquista de Biescas,[1]​ y sólo después de la guerra volvió a emplearse para su actividad inicial.

[4]​ El tratamiento se suele realizar por cura hidropínica o bebiendo el agua.

En este mismo balneario se embotella el agua mineral natural que lleva el nombre de Vilas del Turbón.