Autoindulgencia

Autoindulgencia es el sentimiento de pena o lástima hacia uno mismo que experimenta un individuo en situaciones percibidas como adversas cuando dicha situación no ha sido aceptada y no se tiene la confianza o la habilidad para adaptarse a ella.

[1]​ El individuo autoindulgente cree ser víctima de una situación negativa y por tanto merecer condolencia.

La autoindulgencia es, de forma general, considerada un sentimiento negativo que no sirve de ayuda para tratar con situaciones adversas; sin embargo, en un contexto social puede dar lugar a despertar simpatía o consejo.

La autoindulgencia puede vincularse a una respuesta emocional que surge en un momento de estrés.

El paciente debe reconocer que su actitud tiene como motivación oculta lucir las propias culpas y miserias con objeto de obtener la compasión de los demás, y que una vez consigue esa atención externa, aumenta el victimismo incrementando, como factor multiplicador, los factores que le hunden en la espiral depresiva, el paciente no tiene por qué ser consciente de este hecho y parte del tratamiento consistirá en tomar consciencia de ello.

En la puertas de la eternidad . El pintor holandés Vincent van Gogh , aquejado de un grave trastorno mental, pintó este cuadro en 1890.