Atentados en hoteles de La Habana de 1997

[2]​ Di Celmo estaba de visita en Cuba con su padre y se hospedaba en el hotel.

El exiliado cubano Luis Posada Carriles, admitió haber organizado los atentados.

En una entrevista grabada con The New York Times, Posada dijo: "Es triste que alguien esté muerto, pero no podemos detenernos".

"[3]​ En marzo de 1999, Raúl Ernesto Cruz León, quien Luis Posada Carriles admitió que era un mercenario bajo su empleo, fue sentenciado a muerte por las autoridades cubanas luego de admitir los ataques, junto con su compatriota Otto René Rodríguez Llerena.

[5]​ En marzo de 2005, Luis Posada Carriles ingresó a los Estados Unidos con un pasaporte falso y solicitó asilo político.