[1] Como resultado, dos guardias civiles fallecieron: Carlos Sáenz de Tejada García y Diego Salvá Lezaun.
[3] Nada más cometerse el atentado a las 13:30 hora local, las fuerzas de seguridad del Estado pusieron en marcha la denominada Operación Jaula que se activa tras cualquier ataque terrorista con el fin de identificar y arrestar a los responsables del mismo.
Instantes después, el alcalde, Carlos Delgado Truyols, suspendía el pleno confirmando que había ocurrido un atentado, con dos víctimas mortales.
El término de Calviá quedó completamente acordonado, con enormes atascos y realizándose controles policiales en todas sus rotondas.
[9] Como resultado del atentado, fallecieron los dos guardias civiles que tripulaban el vehículo: A los funerales por las dos víctimas celebrados en Palma al día siguiente del atentado asistieron tanto los Príncipes de Asturias como el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, el jefe de la oposición, Mariano Rajoy y el lehendakari Patxi López.
Los detenidos eran los encargados de suministrar armas y explosivos a los comandos que luego atentaban en España.
Los agentes, en un registro efectuado en la casa donde se escondían, encontraron varias pistolas en su poder.