Comandos del Servicio Aéreo Especial (SAS), que se hallaban embarcados en el portaaviones HMS Hermes (R12) , se encargaron de eliminar la amenaza con el apoyo de la fragata Tipo 22 HMS Broadsword, escolta defensiva del portaaviones, y del destructor clase County HMS Glamorgan, que proveyeron fuego naval de apoyo con sus cañones.
La navegación del acercamiento fue conducida por un miembro de la Boat Troop que había realizado el reconocimiento.
Cuando el grupo de ataque se acercó al blanco, apuntaron a un centinela argentino, no obstante no fueron comprometidos, permitiendo llegar al blanco y poner cargas explosivas en siete de los aviones.
Fue herido a un soldado británico mientras que el equipo de ataque devolvió el fuego usando las armas ligeras y los lanzagranadas M203, dando por resultado la muerte del oficial al mando argentino (según la versión británica) y la supresión de cualquier esfuerzo defensivo.
La versión de Argentina indica que sus infantes de marina permanecían ocultos en abrigos durante el ataque del HMS Glamorgan, así que no estaban totalmente disponibles para hacer frente al SAS en combate.
Las ráfagas fueron accionadas en la creencia que la operación era un asalto completo para asumir el control la base aérea.
También se sumó el Grupo de Tareas 80.1 a cargo del contraalmirante Héctor Martini.
El otro Sea King salió hacia Río Gallegos para cumplir estación de rescate.
Para esto, sobrevolaron las islas Trinidad y Vigía, cruzando la bahía San Francisco de Paula.