Asociación Argentina para el Progreso de las Ciencias

Tal iniciativa se profundizó hacia agosto de 1933, cuando el entonces senador Carlos Serrey (1873-1957) afirmó que en el país no existían profesionales dedicados exclusivamente a la investigación científica ni a la difusión o enseñanza de sus resultados y hallazgos.

Bernardo Houssay, que hacía tiempo se dedicaba a la indagación en fisiología así como reivindicaba la importancia de las prácticas científicas en el país, consideró injusta la declaración.

Al breve tiempo y en una segunda reunión se confirmó el nombre de Bernardo Houssay como presidente del Primer Colegiado Directivo.

Los otros integrantes del Colegiado, miembros fundadores de la AAPC, eran científicos especializados en distintas disciplinas como la biología (Juan Bacigalupo), la ingeniería (Enrique Butty, Lorenzo R. Parodi), la química (Horacio Damianovich, Venancio Deulofeu, Enrique V. Zappi), la medicina (Pedro I. Elizalde), la microbiología (Alfredo Sordelli), la matemática (Juan C. Vignaux) y la física (Adolfo T. Williams).

[1]​ En sus inicios la AAPC funcionó en la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales (calle Perú 222) y más tarde se trasladó a la Avenida Roque Sáenz Peña 555, en un local facilitado por la familia del fisiólogo Eduardo Braun Menéndez (1903-1959), quien se había unido a la Asociación tiempo después de su fundación.

En general, estas becas fomentaban proyectos en diversas áreas de la medicina, la química, la bioquímica, la ingeniería e ingeniería agrónoma, las ciencias exactas, la veterinaria y, en menor medida, las ciencias económicas y sociales.

Asimismo, durante estos años, la AAPC otorgó 119 subsidios para efectuar trabajos de investigación que implicaron un aporte cercano a los 250.000 pesos.

Las terceras Sesiones Científicas Argentina, en tanto, tuvieron lugar nuevamente en Buenos Aires en el año 1956.

Cada dos años, el Colegiado Directivo entrega el Premio Dr. Eduardo Braun Menéndez destinado a promover la divulgación de diversas áreas del conocimiento.

Además, desde el año 2015, la APPC fomenta el Encuentro Permanente de Asociaciones Científicas (EPAC), del que ha asumido su representación formal y su coordinación.

Desde el año 2014, la AAPC también se dedica a la edición de libros electrónicos de difusión libre, cuyos propósitos apuntan a vincular las ciencias sociales y humanidades con las ciencias fácticas y formales.