Asesinos de Brabante

El caso se ha convertido en la ola de crímenes sin resolver más notoria en la historia del país.Según varios testigos, la banda estaba compuesta por tres participantes activos en los asaltos, ayudados por otros que suministraban apoyo logístico y reunían información sobre asuntos específicos.Décadas después, la policía practicó una investigación en la zona y encontró evidencias de la detonación de un arma, lo que llevó a los investigadores a creer que un miembro, posiblemente el líder, fue rematado por sus cómplices y enterrado en el bosque.[1]​[2]​[3]​ El grupo mostró algunos indicios de que eran delincuentes experimentados, pero extrañamente también dejaron ver características irracionales o poco profesionales.Los asesinatos se intensificaron hasta el atraco final, cuando los espectadores fueron muertos a tiros en el aparcamiento, y una vez dentro del local otras víctimas, incluidos niños, fueron objeto de disparos a escasa distancia mientras estaban tendidos en el suelo.En este sentido, la amenaza comunista sobre Europa Occidental habría servido de justificación para una red paramilitar Gladio que, creada y apoyada por la OTAN, fue activada para aterrorizar a la población.Mucha gente consideraba que Latinus probablemente se había inventado esos contactos con organismos secretos del gobierno para aumentar su prestigio dentro de la organización.Insistió en que el líder del WNP, el difunto Paul Latinus, no le contó el propósito detrás de aquellas asignaciones.Una versión apunta a que el atraco de Overijse habría servido para encubrir la muerte violenta del banquero Léon Finné, presuntamente conectado con las mafias implicadas en el negocio del tráfico de armas ilegales.Hay también varias teorías de la conspiración complejas que involucrar a notorios criminales profesionales como Patrick Haemers o Madani Bouhouche, ambos ya fallecidos.
en memoria de las víctimas de los atentados entre 1981 y 1985. Aalst .