[1] De acuerdo a su desarrollo suele dividirse en seis estilos: Broa-Oseberg, Borre, Jelling, Mammen, Ringerike y Urnes.
[1] El estilo Broa-Oseberg se considera el primer período del arte vikingo.
[1] El estilo Borre (primera mitad del siglo IX — segunda mitad del siglo X) debe su nombre a un barco funerario hallado en Borre, Noruega.
Las piezas alcanzan mayor finura en la técnica de filigrana y granulación.
El estilo se extendió a las islas británicas, donde alcanzaría bastante popularidad.
[1] Lo característico son las figuras animales en forma de S, con la cabeza en perfil y similar a la de un dragón, mandíbulas abiertas en ocasiones mostrando colmillos y un típico pliegue sobre el labio superior.
[1] Lo característico del estilo es la presencia de elementos animales, formas vegetales (zarcillos, hojas) bien definidas, o figuras geométricas (principalmente círculos y figuras en espiral, pero también triángulos) que se agrupan o rodean a una figura animal de mayor tamaño.
Por primera vez aparece en la decoración la forma de cruz y palmetas.
Fue bastante común en Inglaterra e Irlanda, donde se enriqueció de las tradiciones artísticas locales.
Las figuras animales son delgadas, con extremidades, cuando las hay, bastante más esbeltas que el tronco; cuello largo y cabeza estilizada, con ojos en forma de almendra.