Aquí pasa por la urbanización Arroyo de Trofas, a la que da nombre.
Cruza posteriormente la valla del Monte de El Pardo, enclave perteneciente al término de Madrid, donde amplía su valle.
Se trata de la segunda corriente fluvial más importante del Monte de El Pardo, después del río Manzanares.
De ahí su importancia ecológica, ya que actúa como corredor biológico que conecta la Sierra del Hoyo y el citado monte.
Los bancos del río en Torrelodones también acomodan el olmo blanco, Ulmus laevis; la especie es una rareza en España.