Fue informado de la presencia del bandolero y dirigió a sus soldados a dicha localidad, pero un funcionario mediano de Madero, puso en aviso a Zapata para que escapara, el abogado Gabriel Robles Domínguez.
Al caer Francisco I. Madero en la decena trágica, apoyó a Victoriano Huerta y fue el primero en combatir a Venustiano Carranza, defendiendo exitosamente la ciudad de Saltillo y haciendo huir a Carranza a la hacienda de Guadalupe, donde proclamó el plan con dicho nombre; fue ascendido a general de brigada en 1913 por méritos en la defensa de la ciudad de Saltillo, Coahuila, en marzo de ese año.
Ya disuelto el gobierno de Victoriano Huerta y del Ejército Federal se adhirió a la Convención de Aguascalientes y luchó en las fuerzas villistas del Bajío.
Desempeñó comisiones en los Estados Unidos para Francisco Villa para surtir de armas y parque, vivió ahí varias ciudades fronterizas algún tiempo.
Regresó al país, al triunfo de la Rebelión de Agua Prieta en 1920, se le negaron sus grados militares en el ejército federal.