Fue probado con éxito por el Regio Esercito en 1939, prefiriéndolo sobre los otros participantes del concurso para su dotación con un fusil semiautomático, el Scotti Mod.
X y el Breda PG, por lo que ordenó 10.000 unidades a la Società Anonima Revelli Armiguerra de Génova.
Su nombre se deriva del código telegráfico de la empresa, Armaguerra.
Cuando Italia entró a la Segunda Guerra Mundial, la transición al nuevo cartucho no se había completado y la producción del Armaguerra Mod.
La conversión del fusil al antiguo calibre de 6,5 mm requirió un rediseño parcial, porque el cartucho 6,5 x 52 Mannlicher-Carcano produce una presión de 3.000 atmósferas respecto a las 2.500 atmósferas del 7,35 x 51 Carcano.