En 1624, un contrato para la construcción del primitivo conducto fue firmado con Domingos da Rocha, que no llegó a iniciar los trabajos.El gobernador, quien, alterando el proyecto original, defendió la ventaja de prolongarse la obra hasta el Campo de Santo Antônio (actual Largo da Carioca), optando por los llamados Arcos Velho - un acueducto ligando el morro del Destierro (actual morro de Santa Teresa Al morro de Santo Antônio, inspirado en el Acueducto de las Aguas Libres, que entonces comenzaba a levantarse en Lisboa.La obra estaba concluida en 1723, llevando las aguas a la Fuente de la Carioca, fuente levantada también ese año, que las distribuía a la población en el referido Campo de Santo Antônio.Se establecieron, además, penas para los actos de vandalismo contra la obra.Al más puro estilo románico, encalada, tiene 42 arcos dobles y óculos en parte superior.