Las clases más comunes son el puente biarticulado en los arranques y el puente triarticulado con una rótula adicional en la clave del arco; aunque también existen versiones con una sola articulación en la clave del arco.
Las rótulas en los arranques evitan que los momentos flectores se transfieran a los pilares del puente.
Un puente triarticulado es isostático, mientras que los otros tipos no lo son.Un puente de arco fijo, es decir sin rótulas, ejerce un momento flector en los estribos y las tensiones provocadas por el cambio de temperatura o retracción del hormigón deben ser absorbidas por el arco.
Habían intentado introducir una tercera rótula en la clave, pero no lo consiguieron porque el espesor del arco era insuficiente.
[7] Los puentes de arco triarticulados siguen siendo populares en la ingeniería civil moderna.