Hay que destacar la limpieza de la forma, fundiendo arco y contrafuertes.
El proyecto original definía la simetría en sus bases; la actual asimetría se debe a errores de replanteo de la cimbra durante su ejecución y los pequeños ajustes tras el descimbrado.
Sin utilidad práctica conocida, posiblemente fue construido como un alarde, consecuencia de la rivalidad entre hierro y ladrillo a finales del siglo XIX y principios del siglo XX.
[2] Sin embargo, con la cancelación del proyecto de soterramiento, su continuidad parece garantizada, incluso con una posible restauración si finalmente se reemplaza el viaducto anexo por un túnel.
En el presente caso, se realiza como obra auxiliar de la plataforma ferroviaria; por motivos que no constan en la documentación conservada, el proyecto no entró en funcionamiento o fue desechada su utilidad poco después, conservándose, por tanto, solo la obra maciza o arco soporte (de ladrillo en el presente caso) sin los complementos que se suelen añadir para la conducción del agua apoyados en el mismo.