Este edificio sirve como sede del Instituto de Estudios Portuarios.
Destaca el tratamiento bícromo del exterior en blanco y rojo, que le aporta uniformidad con los restantes edificios de la plaza de la Marina.
El edificio es obra de los arquitectos Enrique Verdú y Leopoldo Werner.
Entró en funcionamiento tras el traslado de la cabecera desde La Malagueta hasta la entrada del puerto.
En 1995, fue sometida a una restauración por Juan Pablo Gómez de la Fuente.