Estas memorias plantaron la base de la película Jarhead dirigida por Sam Mendes y estrenada en 2005.
Sin embargo, durante su servicio en el Golfo nunca disparó su arma en combate a pesar de estar bajo fuego tanto enemigo como amigo.
Tras la guerra Swofford fue ascendido a cabo y se sentía incómodo con el hecho de ser considerado un héroe, y se perdió deliberadamente el desfile de bienvenida a la base.
Swofford volvió a la universidad haciendo una gran variedad de trabajos para pagarla.
En el libro relata su deprimente vida como marine y, de hecho, se muestra a sí mismo bajo una visión poco favorecida.
Swofford ha publicado artículos tanto de ficción como no en The New York Times.